Al momento de seleccionar un aislante térmico, es importante tener en cuenta tanto los beneficios como las limitaciones de los diferentes tipos existentes. La elección adecuada puede tener un impacto significativo en el rendimiento, la eficiencia y la seguridad de los equipos industriales.
A continuación analizamos algunos de los diferentes tipos de aislantes disponibles para las industrias. Evaluamos sus características, sus ventajas y desventajas.
Tipos de aislantes térmicos
Existen diversos aislamientos térmicos industriales, todos ellos con sus propias características y aplicaciones. Los más comunes son:
- Aislantes de fibra cerámica: se encuentran compuestos por filamentos de pequeñas dimensiones, elaborados con minerales de aluminosilicato de alta pureza. Ofrece una resistencia térmica adecuada para la protección contra altas temperaturas. Sus aplicaciones más comunes son en hornos industriales, calderas, conductos de ventilación, turbinas, tuberías, entre otros.
- Aislantes de fibra de baja biopersistencia: están elaborados de fibra biosoluble, y es utilizada para el aislamiento contra altas temperaturas. Algunas de sus aplicaciones incluyen techos, paredes, ductos de aire, así como calderas y tuberías.
- Aislantes de fibra de vidrio: este tipo de aislante está hecho de fibra de vidrio y se utiliza comúnmente en sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, así como en equipos industriales.
- Aislantes de lana mineral: están hechos principalmente de fibra mineral y se utilizan comúnmente en la industria para aislar tuberías, tanques de almacenamiento y equipos.
- Aislantes de lana de roca: fabricados con roca basáltica natural y mineral coque (carbón). Se emplean comúnmente en cubiertas, muros interiores con postes de aceros y en pisos.